Invencible para los demás cocidos se ha vuelto Talento Chileno. La apuesta de Chilevisión nuevamente arrasó anoche con el rating.

El espacio busca promesas alcanzó un peak de sintonía de 39 puntetes, con las presentaciones de un grupo de alumnas del Colegio San José y la de Claudio Patricio Valdés, de 18 calendarios.


Éste último, sorprendió al jurado y al respetable con una performance flamenca y con una sufrida historia personal.

Resulta que el cabro, oriundo de Talca, canta en las micros y en los paseos peatonales debido a que se viró de la casa producto de atados familiares.

"Mis papás no saben que me presenté a Talento Chileno. Ojalá me vean en la televisión para que aprecien lo que tienen", señaló Claudio, compungido.

Apenas el muchacho entonó las primeras notas flamencas con su guitarra, la Fran García-Huidobro y el resto de los jurados abrieron así unas tremendas pepas de la emoción.

Otro de los números que llamó la atención fue el que realizó una especie de clon de Florcita Motuda.

Se trataba de Eduardo Brito, quien en 2002 decidió salir a las calles a mostrar su "arte", inspirado en el famoso Flautista de Hamelín.